Colectivo de arquitectas

En este relato, la arquitecta Bárbara Rossen contó a Vertientes del sur cómo surgió y cuál fue el recorrido del Colectivo de Arquitectas, en estos meses que duró la Audiencia Pública.
“Nos constituimos como Colectivo cuando se presenta el proyecto y empezamos a decir que había que hacer algo, que tenia que ser masivo o sino éste era un proyecto más que iba a pasar de largo.
“Decidimos hacer una carta que firmamos 342 arquitectas pidiendo el archivo del proyecto, que se cumpla con la Constitución, con la identidad de la ciudad de Buenos Aires como ciudad ribereña, con el compromiso de sustentabilidad con las generaciones futuras, que estamos atravesando la pandemia, que hay una crisis climática, que es muy grave seguir desprendiéndonos de las tierras públicas.
“Este reclamo lo llevamos también a los medios y empezó a tener mucha repercusión. Nos pusimos en contacto con otras organizaciones ciudadanas, civiles, partidarias, jóvenes, y nos propusimos una estrategia conjunta en defensa de las tierras públicas, que era visibilizar esta audiencia para que sea masiva y que se convierta en un hecho político.
“Escribimos los fundamentos y lo pusimos a disposición de todos para que se informen y se inscriban en la audiencia pública.
“Presentamos la carta el 28 de septiembre de 2020, las audiencias empezaron el 27 de noviembre. Trabajamos muchísimo, y también acompañó la oposición en la Legislatura. Pero esto surgió desde la ciudadanía.
“Nosotras decimos que es un espacio muy diverso y plural el que se configuró para esta defensa de las tierras públicas, incluso el Colectivo de Arquitectas también es muy diverso, desde lo generacional, desde lo político. La riqueza es la transversalidad y la diversidad.
“Nosotras necesitamos como arquitectas que la Ciudad empieza a reconocer la mirada de las mujeres en lo que es la construcción de la ciudad. Y es desde esta perspectiva de género, que nos propusimos llevar adelante esta defensa. Somos todas arquitectas, en estos momentos somos 400.
“A pesar de la diversidad que mencioné, hubo una unidad, estar de acuerdo en la defensa de las tierras públicas y trabajarlo en conjunto, y en este accionar también influyó la cosa expeditiva de las mujeres que en tres días juntamos las firmas, presentamos la carta y nos organizamos, porque las instituciones tienen más vueltas, si lo queríamos hacer de manera institucional no íbamos a conseguir este objetivo.
“Lo que hicimos fue motorizarlo y después nos acompañaron las instituciones porque tanto el Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo como la Sociedad Central se expidieron en audiencia pública y pidieron el archivo del proyecto.